Llega el momento en que hay que pasar página, cerrar ese capítulo
interminable y buscar otro libro. Hay historias que parecen infinitas. Siempre continúan
capítulos nuevos, no por ello son mejores que los anteriores, más bien como
esas películas que tienen parte 1, 2 y 3… y por más películas que produzcan
ninguna será tan buena como la primera, más bien van empeorando con cada una
que continúa. ¿Por qué cuesta tanto dejarlo en un punto final? ¿Para qué
intentar continuar historias que ya tenían su fin? A veces hay que armarse de
valor y coger un libro nuevo completamente diferente, virgen en nuestras manos,
empezar a leerlo y fascinarse entre sus páginas, viviendo aventuras nuevas,
nada que ver con el libro que dejamos atrás. Cierto es que no es fácil
encontrar un libro que realmente enganche, pero también es cierto que no es
imposible. Yo empiezo muchos libros y algunos no llego ni a la mitad de la
historia para darme cuenta que no me interesa seguir leyéndolo. Resulta tan
fácil dejar unos libros a mitad y tan difícil dejar de pasar páginas y más
páginas, capítulos tras capítulos de otros.
Todos andamos buscando la historia perfecta, un final feliz. Quizás ese
final feliz haya llegado hace tiempo y ni nos hemos dado cuenta por buscar algo
más, más aventuras que quizás ya nunca se escriban, pero que, seguíamos con la esperanza de vivirlas. No por intentar leer una y otra vez la misma
historia, los mismos capítulos los vayamos a vivirlos igual, más bien vamos a
notar como las páginas se van decolorando, dejando marcas entre nuestros dedos
con cada hoja que volvemos a pasar.
Algunos libros no deberían guardarse
para toda la vida. Si ya los hemos leído y hemos llegado a su fin ¿para qué
guardarlos en la estantería? Solo le roban el espacio a nuevas historias que
pueden ser más increíbles y bonitas aún
que las que las que ya conoces. Así que lo mejor es dejar que ese libro encuentre otras manos, para que juntos puedan disfrutar de su propia historia. Una
historia que no vivirán igual, porque cada uno la vivirá a su manera, quizás
mejor o peor, pero vale la pena empezar ese capítulo nuevo y descubrirlo.